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UN AMOR

Unas rosas para una mujer muy amada,
con todo mi cariño y con mucha ternura,
a quién ofrezco en mis brazos posada,
y llevarme el encanto de su hermosura;

por que tanta la espera para amarla,
y no decirla con un gesto en cada día,
que es a quién mis ojos quieren mirarla,
y que por su amor espero mi vida mía;

por que decir al corazón que no hable,
mendigando por u beso mis pasiones,
a una mujer que ser tan puro y afable,
en quién mi corazón fía sus oraciones;

por que he de decirme el corazón,
cuando debo decirla que la quiero,
no comprendo el porqué de la razón,
si existe un sentimiento bien sincero;

con unas caricias de cálido frescor,
quiero yo poder amarla con dulzura,
y delatar sin medida a mi amor,
a quién prometo llenarla de ternura;

por las noches en una estrella la vería,
por los días en el sol y las canciones,
siendo mis noches y mis días de alegría,
lleno de paz con muchas bendiciones;

de mis labios un dócil suspiro ella llevaría,
  de mi boca un beso del cual quede soñada,
a cambio yo recibiré el amor que merecía,
y la ilusión de haber hallado mi amada.

Libro:Escribiéndole Al Amor